CASCOS AZULES

Vuelven los cascos azules: Uruguay anuncia el regreso de sus 200 soldados en serivicio para la ONU

Mario Lubetkin y Sandra Lazo anunciaron que el 3 de julio llegarán los efectivos uruguayos desde Entebbe, Uganda. El relevo estaba previsto para enero, pero fue demorado por la ONU por razones de seguridad.

Tras meses de gestiones y reclamos por parte de Uruguay, el gobierno confirmó oficialmente el regreso de los militares uruguayos destacados en la misión de paz de la ONU en la República Democrática del Congo.

La operación de repatriación, que debió concretarse en enero, finalmente se realizará el próximo 3 de julio, según anunciaron en conferencia de prensa el canciller Mario Lubetkin y la ministra de Defensa, Sandra Lazo.

Los soldados, que se encuentran en la base “Batallón Uruguay IV”, viajarán desde la ciudad de Entebbe, en Uganda, hasta el Aeropuerto de Carrasco, en un vuelo de la aerolínea Ethiopian Airlines que durará cerca de 20 horas. El arribo está previsto para las 20:00 horas.

“El retraso en el recambio había generado una situación insostenible”, declaró Lazo, quien ya había manifestado públicamente su molestia por la falta de respuesta de la ONU y había exigido la rotación inmediata. Incluso se sumaron reclamos de familiares y reuniones urgentes con autoridades del Ministerio de Defensa.

Lubetkin, por su parte, destacó que las negociaciones realizadas en Nueva York con representantes de la ONU finalmente dieron resultado gracias a un nuevo escenario diplomático y militar más favorable en la región. “Se logró avanzar gracias al acuerdo entre los gobiernos del Congo y Ruanda, y a una mejora en los canales de diálogo entre la ONU, ambos Estados y el Movimiento M23”, explicó.

Una vez que el grupo de entre 150 y 200 soldados llegue al país, se prevé que el proceso de recambio continúe con el envío de nuevos efectivos. “Si todo marcha como lo acordado, los soldados preparados para relevarlos partirán al día siguiente, el 4 de julio, en el mismo avión”, agregó el canciller.

La ministra de Defensa también detalló la situación actual del contingente, reconociendo que la prolongación de la misión afectó de diversas maneras al personal. “Hay mucha diversidad en las experiencias y estados. Contamos con diez integrantes del área médica que han sido clave para acompañar la misión”, señaló.

El retraso del relevo se debió a que la ONU consideró que el aeropuerto de Goma, principal punto logístico en la región, no ofrecía las condiciones de seguridad necesarias para realizar las rotaciones. Sin embargo, Uruguay mantuvo una postura firme durante meses, denunciando la extensión injustificada del despliegue.

Con esta operación, se pone fin a una situación que mantenía en vilo a cientos de familias uruguayas, y se reanuda con normalidad el compromiso del país con las misiones de paz, uno de los ejes históricos de la política exterior uruguaya.