luto
Consternación por la muerte de la influencer dominicana Carol Acosta.
Reconocida por sus mensajes de amor propio y aceptación, la creadora de contenido, conocida como Killadamente, falleció a los 27 años. Su partida deja un profundo vacío entre sus millones de seguidores.
El mundo digital se encuentra de luto tras el fallecimiento de Carol Acosta, popularmente conocida como Killadamente, una destacada influencer dominicana de 27 años que inspiró a millones con sus mensajes de aceptación y superación personal.
La familia confirmó la noticia del deceso, aunque no se han precisado aún las causas oficiales. Según los primeros reportes, la joven estaba compartiendo una cena con sus seres queridos en un restaurante cuando comenzó a presentar dificultades para respirar, lo que derivó en un paro cardiorrespiratorio fatal.
En declaraciones, Kathyan, hermana de la influencer, explicó: “Estaba comiendo cuando comenzó a quedarse sin aire... no pudo respirar más”. En redes sociales, Kathyan también compartió un mensaje lleno de amor y dolor: “Te amo y siempre lo haré. Descansa en paz, hermana mía”.
La vida de Killadamente: un legado de aceptación
Nacida en República Dominicana en 1997, Carol Acosta emigró con su familia a Nueva York cuando tenía 12 años. Desde entonces, su vida estuvo marcada por el desafío de enfrentar el bullying y transformarlo en una causa.
A través de sus plataformas, donde acumulaba millones de seguidores, compartía reflexiones sobre el amor propio, la autoestima y la importancia de ser auténtico.
Su humor único y carisma la convirtieron en una figura emblemática para muchas personas que luchaban por aceptarse a sí mismas.
Instagram, su red más influyente, albergaba una comunidad de casi 7 millones de seguidores que encontraban consuelo e inspiración en sus publicaciones.
Una despedida desde el corazón
Mensajes de tristeza y gratitud han inundado las redes sociales desde la noticia de su partida. “Ella me enseñó a amar mi cuerpo como es”, escribió un seguidor. Otros destacaron su luz y su capacidad de ayudar a los demás a encontrar su propia fuerza.
El fallecimiento de Carol Acosta deja un vacío difícil de llenar en el mundo de las redes sociales y en los corazones de quienes la admiraban. Su legado, sin embargo, seguirá vivo en los mensajes que compartió y en las vidas que transformó.