Gestos que abrigan más que el invierno
Un armario con alma: estudiantes de Pan de Azúcar tejen abrigo y dignidad en su escuela técnica
En pleno festejo por el natalicio de Artigas, la Escuela Técnica de Pan de Azúcar lanza una propuesta que va más allá de lo educativo: un ropero solidario creado por los propios estudiantes para asistir a quienes más lo necesitan en los meses más fríos del año.
Mientras la ciudad de Pan de Azúcar se engalana para homenajear a su prócer con danzas tradicionales y desfiles de caballería gaucha, un gesto silencioso pero poderoso nace entre aulas y pasillos.
En la Escuela Técnica Profesor Agrimensor Julio Rubio, un grupo de jóvenes ha decidido transformar la empatía en acción concreta: han creado un ropero solidario.
La propuesta es sencilla, pero profundamente significativa. Consiste en reunir ropa de abrigo, calzado, gorros, guantes y todo aquello que pueda aliviar el frío de quienes atraviesan el invierno sin lo básico.
Lo conmovedor es que no hay detrás grandes campañas, sino voluntad genuina de ayudar. Cada prenda donada, cada bolsa entregada, representa el deseo de un estudiante de hacer que otro tenga una mañana menos dura.
Este armario abierto, que recibe donaciones durante el horario docente en la sede de la UTU local, no discrimina ni exige. Solo espera recibir y compartir.
Se trata de una herramienta colectiva pensada para cuidar, contener y generar comunidad en una ciudad donde las fuentes laborales son escasas y las necesidades, muchas veces, silenciosas.
En tiempos donde las noticias suelen mirar lo que falta, esta historia recuerda lo que sobra: empatía, compromiso y un sentido profundo de pertenencia. Porque en Pan de Azúcar, no solo se celebra la historia: también se escribe una nueva, tejida con hilo humano y voluntad de abrigo.
Esta información fue posible gracias al aporte de nuestra corresponsal en Pan de Azúcar, Mara Princesa Arévalo.