salud

Aumentó 35% las consultas por gastroenterocolitis

En el contexto del verano, un marcado incremento del 35% en las consultas médicas por gastroenterocolitis ha puesto en alerta a las autoridades sanitarias.

En el transcurso del presente mes, se ha observado un aumento del 35% en las consultas médicas relacionadas con la gastroenterocolitis, una afección que tiende a manifestarse con mayor frecuencia durante los meses de verano. El Dr. Carlos Montoya, brindó información sobre esta tendencia y ofrece recomendaciones para prevenir y manejar la enfermedad.

Según el Dr. Montoya, la gastroenterocolitis se atribuye en la mayoría de los casos a virus, principalmente el rotavirus, que afecta el tracto digestivo. Los síntomas comunes incluyen dolor abdominal tipo cólico, ocasionalmente acompañado de náuseas y vómitos. Aunque en algunos casos se puede presentar fiebre, generalmente no supera los 38°C.

El tratamiento principal se centra en una buena hidratación, evitando alimentos muy condimentados o grasos. La clave es aumentar la ingesta de líquidos, preferiblemente aquellos que contengan potasio, como las sales de rehidratación oral. Este enfoque es aplicable tanto a adultos como a niños, con especial atención a personas con diabetes y adultos mayores, quienes pueden ser más propensos a la deshidratación.

El Dr. Montoya subrayó que la gastroenterocolitis se transmite principalmente por el contacto con alimentos contaminados y la falta de higiene de manos. En este sentido, enfatizó la importancia de lavarse las manos antes de ingerir alimentos y de preferir lugares de confianza para consumir comestibles, evitando la compra de alimentos en la calle.

El médico también destacó la necesidad de estar alerta a posibles signos de alarma, como la boca seca, el aumento en el número de deposiciones y episodios de vómito. En el caso de personas con diabetes, se recomienda estar pendiente de las cifras de glucemia. Se desaconseja la automedicación, sugiriendo solo el uso de medicamentos para bajar la fiebre y, eventualmente, antiespasmódicos para el dolor abdominal. Sin embargo, se subraya que el uso de antibióticos y antidiarreicos debe realizarse bajo prescripción médica.