JOSÉ IGNACIO
Boya Petrolera: sin solución concreta se apela a técnicos chilenos especializados
El desperfecto en una tubería de José Ignacio obligó a suspender la refinación local de combustibles y a importar productos ya procesados, una alternativa más costosa que, según la empresa estatal, no impactará en el precio al público. Esto, tal cual lo había adelantado Cadena del Mar, en el segmento #CadenaInvestiga.
La producción nacional de combustibles atraviesa semanas críticas luego de que se detectara, el pasado 3 de agosto, una fisura en el caño que conecta la boya petrolera de José Ignacio con tierra firme.
Por allí ingresa el crudo importado que abastece a la refinería de La Teja.
Ante el imprevisto, ANCAP debió suspender la recepción de petróleo y pasar a comprar nafta, gasoil y supergás ya refinados, lo que supone mayores costos.
La presidenta de la empresa, Cecilia San Román, confirmó que para resolver el problema se recurrió a un equipo de técnicos chilenos, expertos en reparaciones submarinas de este tipo.
El caño, ubicado a 20 metros de profundidad y recubierto por tres capas de aislante, requiere maquinaria específica que Uruguay no posee.
Los buzos intentaron avances con herramientas adaptadas, pero no lograron sellar la pérdida, se indicó oficialmente.
Mientras tanto, evalúan soluciones provisorias para habilitar nuevamente el flujo de crudo.
Si bien el costo adicional de importar combustibles refinados será absorbido por ANCAP y no se trasladará al consumidor, de igual forma son cientos de miles de dólares diarios que el Estado pierde.
La expectativa ahora está puesta en el trabajo de los especialistas chilenos, cuya intervención permitirá restablecer cuanto antes la operativa normal de la principal infraestructura energética del país.
Imagen: ilustrativa.