CONCIENTIZACIÓN
1° de diciembre: Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, un llamado a la prevención, el acceso y la no discriminación.
En Uruguay y en todo el planeta, este día es una oportunidad para visibilizar los avances alcanzados, pero también para reconocer los desafíos que aún persisten en la lucha contra una de las pandemias más significativas del siglo XXI.
Cada año, el 1 de diciembre, el mundo se une para conmemorar el Día Mundial del SIDA, una fecha clave para concienciar sobre el impacto del VIH/SIDA, mostrar solidaridad con quienes viven con la infección y honrar la memoria de quienes perdieron la vida por enfermedades relacionadas.
De enfermedad mortal a condición crónica
Gracias al progreso científico y al acceso al tratamiento antirretroviral (TAR), el VIH ha dejado de ser una sentencia de muerte para convertirse en una enfermedad crónica manejable.
Hoy, una persona diagnosticada a tiempo y adherida al tratamiento puede vivir muchos años con buena calidad de vida. Más aún: cuando la carga viral es indetectable, no hay riesgo de transmisión sexual —una realidad conocida como "indetectable = intransmisible" (U=U).
Sin embargo, todo esto depende de un diagnóstico precoz. En Uruguay, la media de edad de las personas con VIH es de 38 años, y la mayoría son hombres. La vía de transmisión más frecuente es la sexual, lo que refuerza la importancia del uso del preservativo como herramienta esencial de prevención.
Cómo se transmite y cómo prevenirlo
El VIH ataca el sistema inmunológico y se transmite a través de líquidos corporales como sangre, semen, secreciones vaginales y leche materna. No se transmite por saliva, abrazos, besos o compartir alimentos.
Las principales formas de contagio incluyen:
Relaciones sexuales sin protección.
Compartir jeringas u otros elementos contaminados.T
ransmisión vertical (de madre a hijo durante el embarazo, parto o lactancia).
Factores de riesgo: tener otras ITS, consumo de drogas o alcohol en contextos sexuales, y falta de acceso a pruebas y tratamientos.
La prevención es clave. Entre las estrategias efectivas se destacan:
Uso consistente de preservativos masculinos y femeninos.Circuncisión masculina voluntaria.
Pruebas regulares de VIH y otras ITS.
Tratamiento antirretroviral preventivo (PrEP) para personas en situación de alto riesgo.
TAR para mujeres embarazadas, para evitar la transmisión vertical.
Las pruebas rápidas de VIH permiten obtener resultados en minutos, facilitando el acceso al diagnóstico. Es importante recordar que existe un "período ventana" (hasta 28 días tras la exposición), durante el cual el virus puede no detectarse. Por eso, si hubo una exposición de riesgo, se recomienda repetir la prueba después de este periodo.
Avanzar hacia 2030: cero nuevas infecciones, cero discriminación
La OMS, ONUSIDA y el Fondo Mundial tienen como meta poner fin a la epidemia de VIH para 2030, bajo los objetivos 95-95-95:
95% de las personas con VIH diagnosticadas.
95% en tratamiento antirretroviral.
95% con carga viral indetectable.
Para lograrlo, es fundamental combatir el estigma y la discriminación, que aún impiden que muchas personas se hagan la prueba o inicien tratamiento. La educación, la empatía y el acceso universal a la salud son pilares indispensables.