Merendero
Marta Valdez: "Vamos a abrir el merendero porque sé de niños que no tienen que comer el fin de semana"
En una entrevista en "La Mañana en Cadena", Marta Valdez, encargada del merendero Corazones Contentos compartió cómo surgió la idea de abrirlo en la zona del balneario Buenos Aires. Después de años de trabajo solidario en silencio, Marta sintió la necesidad de hacer más por su comunidad.
Marta, quien ha estado involucrada en actividades solidarias en la zona durante años, compartió cómo surgió la idea del merendero y cómo se materializó con la ayuda de la comunidad.
El merendero Corazones Contentos abrirá sus puertas el 4 de mayo a las 15.30 horas, ubicado en la calle 27 casi esquina 49, balneario Buenos Aires. Marta agradeció la generosidad del propietario del supermercado local, por prestar el espacio para el merendero hasta fines de octubre.
"Con la idea de que si yo consigo un lugar físico para dejarlo fijo para los niños que tomen la merienda sábado y domingo, que son los días que no van a la escuela. Yo vi crecer el balneario y es impresionante, hay muchísimos niños, muchísimas mamás con necesidades".
El proyecto tiene como objetivo brindar apoyo alimenticio y, en el futuro, clases de apoyo escolar gratuitas para los niños que lo necesiten. Marta enfatizó que el merendero es apolítico y está impulsado únicamente por el deseo de ayudar a la comunidad. Ofrecerá meriendas nutritivas, actividades recreativas y, en el futuro, clases de apoyo escolar gratuitas.
"Inclusive tengo la compañera Eli, que ella es maestra, me dijo que tenemos en proyecto, no ya, pero a corto plazo, después ver de los niños que están medio flojos en la escuela, como para darle clases de apoyo de matemática, de inglés o de lectura después que se le da la merienda, si algún niño que tiene esa necesidad también se va a cubrir obviamente todo honorariamente".
Se proporcionó un número de teléfono de contacto 095030152 para aquellos interesados en colaborar o beneficiarse del merendero. Marta espera mantener el merendero funcionando durante el invierno mientras busca un espacio permanente más allá de la donación del salón actual.
"Yo voy a seguir trabajando para ver si puedo buscar un lugar físico para dejarlo definitivo y si no es así, lamentablemente hasta fines de octubre, pero por lo menos van a pasar el invierno sábado y domingo merendando en algún lado los niños que no tienen".