REDISEÑO

Nuevo logo del Frente Amplio: polémica en redes por militantes que cuestionan "un cambio simbólico".

El histórico partido uruguayo presentó un rediseño de su identidad visual, pero la nueva versión del logo frenteamplista recibió críticas virales y generó un debate intenso entre simpatizantes y referentes, principalmente en redes sociales.

La identidad versus la estética moderna, sería un posible título al debate que se ha instalado -mayormente en redes sociales-.

Este 1° de agosto de 2025, el Frente Amplio lanzó oficialmente su nueva imagen institucional, diseñada para sustituir el clásico logo que combina la bandera tricolor con las siglas “FA” centradas.

El rediseño separa las precitadas siglas y coloca la bandera en un tamaño reducido en la esquina superior izquierda, siguiendo el símbolo original del año 1971, creado por Manuel Espínola Gómez.

Según la fuerza política, el cambio busca modernizar la comunicación sin perder los valores históricos ni la claridad visual de cara a una nueva etapa institucional.

Sin embargo, en X (antes Twitter), la presentación del nuevo logo encendió una avalancha de críticas.

Usuarios y militantes expresaron que el diseño “pierde la fuerza histórica del original” o se percibe como “más neutro, sin carácter”.

Algunos incluso cuestionaron el momento elegido.

Claudio Invernizzi: rechazo desde la historia y la comunicación.

El publicista uruguayo clave en campañas de Tabaré Vázquez y Daniel Martínez, fue una de las voces más críticas.

En su cuenta de X escribió:

La simbología de un partido no es un logo para elecciones: es la representación gráfica de sus valores, de su proyecto y de su alma. Ética y estética. Por aquí no”.

Su mensaje fue compartido y respaldado por muchos usuarios, que consideran que el logo debe trascender y conectar con la historia del Frente Amplio.

Voces de la militancia: mensajes que reflejan el descontento.

La reacción en X fue masiva.

Militantes y simpatizantes señalaron que el nuevo diseño pierde impacto y personalidad.

Aunque no todos fueron figuras públicas, el tono general fue de rechazo: muchos sintieron que era "un paso atrás" estético y simbólico.

La discusión se centró en si la renovación responde a una búsqueda de modernidad o revela una imagen apartada de la tradición, frente a la población.

¿Qué está en juego?

Para sectores del partido político y referentes históricos de comunicación, el logo original simbolizaba "décadas de lucha y valores sólidos".

El nuevo diseño, funcional pero sobrio, fue visto como desacoplado de ese legado.

Comunicación digital frente a identidad partidaria:

Desde la comunicación oficial del Frente Amplio se argumenta que el cambio moderniza la imagen institucional y mejora su uso en plataformas digitales, sin abandonar su base simbólica.

Sin embargo, algunos críticos advierten que la identidad visual no debe ser planteada como "mercancía electoral", sino como marca perdurable.

Conclusión: mucho más que un logo, una disputa por la identidad.

La polémica por el logo del Frente Amplio dejó en evidencia que, en un partido con más de 50 años de historia, los símbolos pesan tanto como las ideas.

La discusión, evidencia la importancia del legado gráfico y emocional frente a una propuesta que busca ser moderna.

El debate está servido: ¿es posible actualizar una imagen sin perder autenticidad?

La respuesta parece estar lejos de un consenso.