renovaciones y reclamos
Blás y Casaretto sacudieron el Congreso del Herrerismo con duras críticas al Frente Amplio y al presidente Orsi.
El Herrerismo celebró su Congreso Nacional en la Casa del Partido Nacional, donde eligió nuevas autoridades encabezadas por Luis Alberto Heber y escuchó fuertes discursos de Rodrigo Blás y Federico Casaretto, marcados por críticas al Frente Amplio, cuestionamientos al liderazgo del presidente Yamandú Orsi y un llamado a que el Partido Nacional recupere la iniciativa política.
El Congreso Nacional del Herrerismo culminó este fin de semana con la elección de las nuevas autoridades del Comité Ejecutivo Nacional, que será presidido por Luis Alberto Heber. La instancia se desarrolló en la Casa del Partido Nacional y contó con la participación del expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera, además de la presencia como invitados especiales de Álvaro Delgado y Martín Lema. Durante el encuentro se confirmó la integración del nuevo Ejecutivo, que incluye representantes históricos y figuras emergentes del sector, así como delegados de la juventud.

En uno de los discursos centrales, el senador Rodrigo Blás cuestionó con dureza el manejo del Frente Amplio en el Senado durante el tratamiento del Presupuesto Nacional y anunció que el Herrerismo no acompañará la sanción definitiva. Según sostuvo, el Frente Amplio “hizo uso y abuso de una mayoría circunstancial para aplastar los acuerdos logrados en Diputados”. Aclaró que la decisión no compromete el funcionamiento del gobierno, pero sí responde a la defensa de la voluntad ciudadana expresada en la Cámara Baja y a la necesidad de que el Partido Nacional mantenga la potestad de marcar el rumbo.
Blás advirtió además que el país “no crece, reparte lo que no tiene y aumenta impuestos porque se quedó sin frutos”, y reclamó coraje para fijar prioridades nacionales dejando atrás “el falso orgullo de repartir miseria”. Cuestionó el gasto público ineficiente, mencionando al Correo, Portland y AFE, y afirmó que son millones que dejan de destinarse a educación, pobreza infantil y crecimiento.
Sobre el terreno cultural, sostuvo que Uruguay ha perdido la noción de igualdad, al afirmar que “lo único que debe distinguirnos son los talentos y las virtudes”, y señaló que hoy se definen derechos por sexo u orientación. Llamó a recuperar las raíces culturales y los principios occidentales frente a modas, cancelaciones y miedos a hablar con claridad. Con Luis Alberto Lacalle Pou como referencia, instó a que el Herrerismo sea la bandera más firme y la que deje la semilla para el futuro del Partido Nacional.

El diputado Federico Casaretto también realizó un repaso político y legislativo centrado en el rol de control del Partido Nacional, especialmente en las interpelaciones desarrolladas durante el primer año de gobierno. Afirmó que el Partido Nacional votó mejoras al Presupuesto en Diputados, pero que el Senado “dio marcha atrás” y que, en consecuencia, no acompañarán las modificaciones, ya que no se puede votar “sí o no” sin discutir cada artículo.
Defendió la interpelación por el proyecto Arazatí y criticó que el gobierno vuelva a depender del río Santa Lucía. Señaló que el Partido Nacional actuó ante la violación constitucional del presidente de ASSE, subrayando que se trató de un caso donde primaba la ética pública sobre la conveniencia personal. También apuntó contra la JUTEP, a la que acusó de actuar políticamente y no jurídicamente, anunciando que habrá nuevas instancias de control.
El momento que generó los mayores aplausos del auditorio llegó con una anécdota utilizada para cuestionar el liderazgo del presidente Yamandú Orsi. Casaretto relató: “La neuróloga le pregunta al paciente: ‘¿Quién es el presidente de la República?’. Y él contesta: ‘Jorge Díaz’. Y la neuróloga le dice: ‘Usted está mejor que yo’.” Acto seguido, remató:
“Yo no quiero un presidente que genere esa confusión. Quiero un presidente que ejerza el poder que la ciudadanía le dio”, aludiendo a la percepción de que Orsi no ejerce plenamente la conducción, algo que también mencionó al criticar la frase del mandatario en Búsqueda: “Me encanta que piensen que yo no mando”.
En el cierre político, Casaretto llamó a fortalecer la unidad del Partido Nacional y afirmó que el Herrerismo debe marcar el rumbo hacia el futuro. “Vamos a trabajar para que el próximo gobierno sea del Partido Nacional”, concluyó ante el aplauso de los presentes.