¿OTRO PONZI?

Estafa Millonaria: se hacía pasar por escribana y captó víctimas con falsos negocios. Desde Godín hasta Eguren son damnificados.

La maniobra investigada por Fiscalía supera los 5 millones de dólares y tiene como principales damnificados a personas vinculadas al ámbito del fútbol profesional uruguayo. La Justicia decretó medidas cautelares a Lucía Costa Leyba y su pareja, Douglas Machado, para evitar que entorpezcan la investigación; tal cual lo detalla de forma pormenorizada la colega periodista Natalia Roba para el Observador.

Una compleja trama de estafas millonarias, con ramificaciones en el ámbito del fútbol uruguayo de alto nivel, es investigada por la Fiscalía de 2° Turno de Ciudad de la Costa, cuyo titular es el Dr. Ignacio Montedeocar y su equipo conformado con la Dra. Natalia Charquero y el Dr. Ignacio Arias.

Existen un cúmulo de denuncias contra Lucía Costa Leyba y su pareja, Douglas Machado, quienes habrían captado a sus víctimas ofreciendo supuestas inversiones inmobiliarias que nunca se concretaron.

Según surge de la Carpeta Investigativa conformada por los representantes del Ministerio Público, Costa Leyba se presentaba como escribana sin contar con título habilitante, mientras que junto a Machado dirigía el "Estudio Costa Machado", que "funcionaba como pantalla" para atraer inversores.

Además, la pareja es titular de otras "sociedades vinculadas a negocios inmobiliarios", desde donde ofrecían "oportunidades de alta rentabilidad en plazos breves".

La estrategia incluía "mostrarse como empresarios exitosos, vivir en un barrio privado" de Carrasco y "mencionar de forma reiterada que sus principales inversores pertenecían al mundo del fútbol", lo que generaba confianza entre las víctimas.

Bajo ese esquema, lograron captar importantes sumas de dinero, muchas veces los ahorros de toda una vida.

La investigación incluye como damnificados, entre otros, al gerente deportivo del Club Nacional, Sebastián Eguren, a su ex pareja, a su ex suegro, a la hermana de Diego Godín, y a otros inversores que confiaron en la supuesta seriedad del emprendimiento.

En algunos casos, las pérdidas alcanzaron cifras extremadamente elevadas.

La Fiscalía recibió casi una decena de denuncias con un patrón común: dinero entregado para préstamos o compraventas de inmuebles que nunca se realizaron, escrituras inexistentes, documentos falsificados y fondos que eran utilizados para otros fines. Incluso, se detectó el uso de letras de cambio por montos que van desde los USD 50.000 hasta los USD 300.000, además de transferencias bancarias a distintas cuentas.

Uno de los hechos más graves surge del testimonio de una escribana que trabajó en el estudio, quien denunció que Costa Leyba utilizó su "firma escaneada en escrituras falsas", sin su conocimiento, y que "retenía impuestos que nunca eran volcados a los organismos correspondientes, como DGI y BPS".

En otro de los episodios, vinculado a Diego Godín, se constataron contratos de préstamo y supuestas "operaciones inmobiliarias que no estaban inscriptas ni respaldadas por documentación válida".

En un caso puntual, una operación frustrada derivó incluso en el pago de una multa de USD 57.000, que terminó siendo afrontada por la propietaria del inmueble ante el incumplimiento.

A raíz de la gravedad de los hechos y el riesgo de fuga -ya que Costa Leyba había manifestado su intención de viajar a Paraguay-, el Fiscal, Dr. Ignacio Montedeocar, solicitó medidas cautelares.

La jueza, Dra. Lorena García, dispuso la retención de documentosde viaje, la prohibición de salida del país, la fijación de domicilio y la obligación de permanecer a disposición de la Justicia por seis meses.

Para avanzar en la investigación, el Ministerio Público solicitó además el levantamiento del secreto bancario, tributario y profesional, así como informes al Banco Central del Uruguay, la Secretaría Antilavado, DGI y BPS, con el objetivo de "reconstruir la trazabilidad de los fondos" y determinar el alcance total de la estafa.

La causa continúa en etapa de investigación y no se descartan nuevas imputaciones, mientras crece el número de damnificados y se profundiza el análisis del circuito financiero utilizado por la pareja.

Imagen: Cadena del Mar

Información: basada en la investigación de la periodista Natalia Roba para el Observador.