Guerra
La Unión Europea se resigna a pedir una "pausa humanitaria" y no un "alto el fuego" en Gaza
Borrell confirma un "cierto consenso" para un "objetivo menos ambicioso" que permita la entrada de la ayuda humanitaria y la puesta a cubierto de los desplazados
Ni alto al fuego, ni fin de las hostilidades. Lo que la UE está empezando a decir, y lo que probablemente va a pedir esta semana al máximo nivel es una "pausa humanitaria". En los bombardeos israelíes sobre Gaza, en el lanzamiento de cohetes desde la Franja al sur de Israel, para que se pueda materializar la liberación de los rehenes y para que pueda entrar la ayuda humanitaria, que si antes era importante ahora es insustituible para la supervivencia de cientos de miles de personas.
La expresión "pausa humanitaria", utilizada la semana pasada en una resolución de la Eurocámara, es la única sobre la que parece haber "un consenso básico" ahora mismo en Bruselas. Entonces fue criticada porque se quedaba corta (diputados de la izquierda votaron en contra precisamente por eso) pero ahora parece el único terreno firme. Países como España o Irlanda se inclinan abiertamente por el "alto el fuego", y así lo han pedido este lunes sus ministros de Exteriores en Luxemburgo. Pero ni siquiera la fórmula de "alto el fuego humanitario", propuesta por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres (pero no respaldada por una resolución formal), convence en todas las capitales, que creen que es ir demasiado lejos.
Sin duda preferirían que se acabara la violencia, pero muchos, entre ellos los más importantes, creen que no es lo apropiado reclamarlo, pues sería una injerencia en el derecho a la legítima defensa de Israel, al que según todos tiene derecho. Así que no van a ir más allá de momento, igual que EEUU no permitió siquiera la mención a una pausa en la ONU. Lo resume bien el ministro italiano Antonio Tajani: "Apoyamos las pausas humanitarias para enviar suministros, pero una tregua es otra cosa. La tregua no puede significar que Israel renuncie a su autodefensa", ha explicado el responsable de Forza Italia.
"Personalmente pienso que una pausa humanitaria es necesaria para permitir la entrega humanitaria y que sea distribuida en Gaza", ha dicho este lunes el alto representante para la Política Exterior, Josep Borrell, recalcando que "la mitad" de la población en la Franja ha tenido que dejar sus casas o ciudades en la última semana. La palabra clave en esa frase, y en el resto de las que ha pronunciado, es "personalmente". Borrell quiere una tregua, un alto el fuego inmediato, pero es el portavoz de los 27 en materia de Exteriores y Seguridad y sabe que no hay posición común al respecto. Así que puede darle vueltas, definir los términos de forma vaga, insistir en la "preocupación por los civiles asesinados", pero sin ir mucho más allá.
"En El Cairo se habló mucho de la necesidad de detener la violencia y pensar en las víctimas civiles. El alto el fuego es más que una pausa, mucho más. Una pausa es sólo eso, una interrupción de algo que luego continúa. Es un objetivo menos ambicioso que un alto el fuego que es un acuerdo entre las partes. Una pausa puede ser acordada de forma más rápida y creo, que así lo han entendido los ministros", ha admitido con resignación el veterano político español.
El jueves, los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 se verán en Bruselas para una cumbre dedicada, principalmente, a cuestiones internacionales. En el documento de conclusiones que se está negociando, y que puede cambiar de aquí al viernes, se arranca con Ucrania, con nada menos que 11 puntos, reiterando el apoyo al país y tratando de que se mantenga la atención, la ayuda y la presión sobre Rusia, conscientes de que los ojos del mundo se han desplazado a Oriente Medio. "Ucrania ha desaparecido de las noticias pero no de la realidad", ha dicho el alto representante al concluir la reunión.