Sesión ordinaria
Silvana Sentena (PN): "En abril de 2025 había registrados 319 hombres y 3.685 mujeres como empleadas domésticas. Seguramente hay muchas más".
En el marco de la sesión ordinaria de la Junta Departamental de Maldonado, la edila Silvana Sentena (Partido Nacional) rindió homenaje a las trabajadoras y trabajadores domésticos en su día, celebrado el 19 de agosto, y llamó a visibilizar una labor esencial pero aún marcada por la informalidad y la desigualdad.
Con motivo del Día de la Trabajadora Doméstica, Sentena recordó que la Ley 18.065, promulgada en 2006, fue un hito para la regulación de esta actividad: “Es un trabajo de cuidado, de aseo, de organización del hogar, muchas veces invisible, pero absolutamente esencial”, destacó.
La edila enumeró los derechos conquistados: cobertura de salud para la trabajadora y su familia, seguro de desempleo, subsidios por enfermedad, maternidad o paternidad, jornada de 8 horas, descansos semanales y nocturnos, aguinaldo, horas extras, jubilación y derecho a amamantar en el puesto de trabajo, entre otros.
“Tienen derecho a medio horario por cuidados del recién nacido, a licencias, a prima por presentismo y antigüedad. Son derechos, no favores”, subrayó.
Tras consultar al Sindicato Único de Trabajadoras Domésticas del Uruguay, Sentena detalló las principales reivindicaciones del sector, entre las que destacan:
Aumento salarial real: “El salario mínimo del sector es de 23.000 pesos líquidos, uno de los más bajos del país. Con ese ingreso es imposible cubrir alquiler, servicios, alimentación, transporte, estudios. Es un salario sumergido que no alcanza”.
Categorización del trabajo: “Desde 2008 se reclama dividir las tareas en categorías: limpieza, cocina, cuidado de niños, personas mayores o con discapacidad, jardinería, chófer. Hoy se hacen múltiples funciones por un solo salario, sin diferenciación por complejidad”.
Por otro lado, la Legisladora también abordó problemáticas específicas del departamento: la situación de los caseros, que viven en el predio del empleador y cuya categoría laboral aún está en discusión; las empleadas con visa de trabajo que ingresan con sus empleadores, sin una reglamentación clara; y la alta temporada informal, en la que muchas trabajadoras del interior llegan a Maldonado sin contrato, lo que afecta su futuro jubilatorio.
"En abril de 2025 había registradas 3.685 mujeres y 319 hombres como empleadas domésticas en el departamento. Solo 4.004 personas. Seguramente hay muchas más en la informalidad", expuso.
"Y este trabajo, mayoritariamente femenino, ocurre en un contexto de gran desigualdad de género: ganan menos que los varones por el mismo trabajo, muchas son jefas de hogar, y muchas sostienen sus estudios universitarios con este empleo”, agregó la Edila.
Según Sentena, el empleo doméstico en Maldonado es clave para el turismo: "Quienes vienen a vacacionar o a descansar encuentran en estas trabajadoras una gran vocación de servicio, confianza y lealtad”, concluyó.
Finalmente, la referente nacionalista hizo un llamado a “visibilizar cada día esta noble actividad, reducir la informalidad y garantizar derechos plenos”.