Adiós al cigarro

Revolución antitabaco: Uruguay lanza asistente que aumenta 60% las chances de dejar de fumar.

Un nuevo asistente virtual por WhatsApp, creado por el MSP y Agesic, promete aumentar en un 60% las probabilidades de éxito para quienes buscan dejar de fumar, marcando un avance clave en la salud digital del país.

El Ministerio de Salud Pública presentó oficialmente un asistente virtual accesible por WhatsApp (al número 091 365 724) diseñado para acompañar a las personas que desean abandonar el consumo de tabaco o vapeadores. 

Esta innovación digital permite a los usuarios: elegir si quieren dejar de fumar, recibir información sobre tabaquismo y vapeo, ayudar a terceros y denunciar infracciones a la ley de tabaco.  El servicio opera los 365 días del año y busca llegar de forma directa y privada a quienes lo necesiten, sin necesidad inmediata de acudir a una consulta presencial

De acuerdo con los datos revelados, el 18,6 % de los adultos en Uruguay fuma, lo que convierte al tabaquismo en la segunda causa de muerte prevenible en el país.  La coordinadora del Programa Nacional de Control del Tabaco del MSP, Laura Llambí, señaló que los estudios muestran que el uso de esta herramienta puede incrementar en un 60 % la probabilidad de que el proceso de cesación sea exitoso, en comparación con no contar con intervención. 

Durante la presentación, la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg, recordó que desde 2004 Uruguay construyó una política pública antitabaco que lo posicionó como referente internacional, pero que “no se puede avanzar un centímetro hacia atrás” en la agenda de salud. 

La herramienta permite una guía personalizada basada en respuestas a través de WhatsApp.

• Accesibilidad: usa un canal digital, telefónico, pensado para integrarse al estilo de vida actual sin depender de citas o espacios físicos.

• Enfoque integral: incluye apoyo para dejar de fumar o vapear, información para terceros y denuncia de infracciones a la ley antitabaco.

Aunque el incremento del 60 % en probabilidad de éxito es prometedor, aún deberán analizarse variables como la adherencia al programa, el seguimiento a largo plazo y los perfiles de quienes más se beneficien.

Además, será necesario articular este servicio con los centros de salud presenciales y políticas de cobertura para garantizar que quienes lo utilizan tengan apoyo completo.