TESTIMONIO
La historia de Milagros, la niña con TEA y su collar de girasoles
Jennifer es la mamá de Milagros, una niña que elige pasar por la esquina de nuestra emisora para saludar a Rodrigo y a Marcelo. La pequeña vive cerca de la radio, tiene autismo y tiene una mirada muy particular que irradia energía y empatía.
Este lunes, Jennifer se acercó hasta la radio y conversó con quienes ve todos los días cuando pasa con su hija de regreso de la escuela o de hacer mandados.
Milagros tiene 9 años, tiene déficit intelectual y problemas en el habla. Lleva siempre con ella un collar de girasoles.
“Mamá, ahora no se van a reír de mí”, dijo Milagros cuando recibió el collar de girasoles, “eso como madre toca el corazón”, dijo Jennifer.
Este collar está destinado a niños que cuentan con un diagnóstico, como el de Milagros, que tiene tres.
“Cuando tú ves a un niño con un collar es porque tiene una discapacidad visible o no. La mía, si tú te pones a hablar con ella, es visible, pero lo de ella es neurológico”. Y agregó: “Ella va a cumplir 10 años, pero tiene acciones de una niña de 6 o 7 años”.
Milagros asiste a la Escuela Nº1, está en 4º, pero la maestra le asigna tareas acordes a su situación.
Jennifer comentó que hay muchos niños con TEA, algunos son agresivos, otros son retraídos, solitarios, como el caso de su hija.
“Ella tiene con ciertas personas cariño, por ejemplo, cuando ve a Marcelo saluda la tele. El TEA de ella se lo descubrieron hace pocos años, yo como madre ya lo sabía, tengo cinco hijos. Ella no hace nada sola, todo le da miedo”.
La mamá destacó y agradeció la ayuda y el apoyo de la Fundación Sapienza y de Hugo, el instructor de taekwondo que está enseñando a Milagros a tener confianza.
“Quiero que la gente cuando vea un niño con autismo, con el collar, es porque tiene una discapacidad”. Y añadió: “Los comercios que tengan en cuenta que hay niños que no les gusta esperar, se sienten ahogados, hay niños autistas que se sienten encerrados, si ves que un niño tiene un collar hazlo pasar antes”.
Jennifer contó que, al principio, el tratamiento se les hizo cuesta arriba por el alto costo de los mismos. La niña ha tenido que pasar por resonancias magnéticas, electroencefalogramas, extracciones de sangre, entre otros estudios.
Este será el primer año que Milagros tendrá la celebración de su cumpleaños.