Pan de Azúcar

Julio Álvarez bate récord mundial de resistencia con 53 horas en bicicleta

El término de la hazaña, que contó con la presencia masiva de vecinos y autoridades, se convirtió en una verdadera fiesta del pueblo, en el marco de la celebración de los 150 años de la ciudad.

Julio Álvarez, conocido cariñosamente como "Lagarto", logró una impresionante hazaña al pedalear durante 53 horas seguidas alrededor de la plaza de Pan de Azúcar, batiendo un récord mundial de resistencia. 

El Alcalde de Pan de Azúcar, Alejandro Echavarría, que estuvo presente durante todo el desafío, expresó a Cadena del Mar: "Es impresionante lo que ha hecho Lagarto. En los 150 años de Pan de Azúcar, tener a alguien batiendo un récord Guinness es un orgullo. Todos lo conocemos, pero a veces olvidamos que tiene 57 años y logró hacer 53 horas en bicicleta, todo por una causa solidaria".

Álvarez dedicó este esfuerzo para apoyar a una joven que necesita recaudar fondos para su tratamiento médico. "Él lo hace por los demás, es su forma de vida", añadió Echavarría, destacando la naturaleza solidaria del ciclista, conocido en Pan de Azúcar por siempre ayudar a quienes lo necesitan, incluso cuando él mismo enfrenta dificultades económicas.

Un escribano estuvo presente para certificar el logro de Álvarez, asegurando que el récord, en la práctica, ya está listo para ser reconocido por el Guinness World Records, aunque aún falta completar los trámites correspondientes.

La trayectoria de "Lagarto" y el apoyo del pueblo

Miguel Ángel Plada, ex Alcalde de Pan de Azúcar, recordó los inicios de Álvarez en este tipo de desafíos. "Hace años, cuando yo era secretario de la Junta Local, vino un ciclista brasileño que pedaleó 24 horas seguidas en la plaza. Julio lo vio y dijo: ‘Nosotros también podemos’. Y así empezó, superando las 25 horas en aquel entonces".

Plada también destacó el espíritu incansable de Álvarez, no solo en lo deportivo, sino en su labor solidaria. "Julio no da lo que le sobra, da lo que tiene. Y busca cómo ayudar a los demás, siempre pensando en los que más lo necesitan"; expresó.

Decenas de personas acompañaron a Álvarez, a pesar del intenso frío que sentía en el lugar, caminando o trotando a su alrededor, dándole fuerzas en los momentos más duros. "Hubo momentos de flaqueza, pero la gente lo impulsó a seguir adelante", señaló Echavarría. "Al final, andaba volando, con toda la energía del mundo. Esto es histórico para Pan de Azúcar".