PUNTA DEL ESTE
El Faro de Punta del Este: Una guía en todo sentido
Fernando Cairo Medina, subdirector de Cultura de la Intendencia Departamental de Maldonado, nos sumerge en la rica historia de este faro, desde sus orígenes hasta su papel fundamental en la comunidad y su impacto en la identidad de Punta del Este.
"El faro fue el primer centro de reunión", afirma Medina, subrayando cómo este no solo servía como guía para los navegantes, sino también como punto de encuentro para la comunidad desde sus inicios. Inaugurado el primero de marzo de 1860, el Faro de Punta del Este fue construido empleando tierra volcánica, una técnica de construcción típica de la época, por Tomás de Libarona.
Su existencia fue crucial para facilitar la navegación cerca de la Isla de Lobos y el Banco Inglés, especialmente durante tormentas o neblinas, marcando un antes y después en la seguridad marítima del área.
La historia del faro también refleja la complejidad política y social de Uruguay en el siglo XIX.
La construcción de faros se vio obstaculizada por la inestabilidad política, incluyendo la lucha por la independencia y guerras civiles internas.
Sin embargo, la propuesta de Libarona prevaleció, y el faro se erigió no en la Isla de Lobos, debido a la resistencia de los concesionarios de la caza de lobos marinos, sino en la península de Punta del Este.
El faro no solo ha sido una guía marítima sino también un faro cultural.
A lo largo de los años, ha inspirado a visitantes, historiadores y amantes de la historia, como lo demuestra la existencia de un libro de visitas antiguo que recoge impresiones y poesías de quienes ascendieron al faro, algunos de ellos augurando un porvenir brillante para Punta del Este.
El rol del faro en la comunidad ha sido multifacético. "Incluso hasta se celebraba misa en el faro", comenta Medina, resaltando cómo este servía como lugar de culto antes de la construcción de iglesias en la zona.
El faro también jugó un papel crucial en la evolución de Punta del Este como balneario.
"El Faro es una referencia", asegura Medina, explicando cómo desde la construcción de la aduana en 1885 y el surgimiento de la hotelería en la década de 1890, el faro ha sido testigo del crecimiento poblacional y turístico de Punta del Este.
La historia del faro y su papel en la comunidad subraya cómo las estructuras construidas con un propósito funcional pueden adquirir un significado cultural y emocional profundo, convirtiéndose en símbolos de identidad y pertenencia.
El Faro de Punta del Este no es solo un punto de referencia geográfico, sino un pilar de la historia y la cultura de la región. Su celebración es un acto de reconocimiento a su importancia náutica, y también un homenaje a su papel en la narrativa de Punta del Este, una narrativa que Fernando Cairo Medina ha ayudado a iluminar y que continúa inspirando a generaciones presentes y futuras.
Para conocer más sobre el tema, escuche el siguiente audio: