CADENA INVESTIGA

Abuso de autoridad, acoso sexual y pedidos de dinero: las graves denuncias que sacuden a la cárcel Las Rosas

Un informe interno, presentado por un oficial superior de la Unidad 13, expone órdenes arbitrarias, irregularidades en el trato a internos y personal, y riesgos para la seguridad. El caso se suma a una denuncia por acoso sexual contra una funcionaria y a audios que revelan presuntos cobros a presos para obtener traslados.

El documento que destapó la crisis

El 24 de julio de 2025, un oficial superior del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) presentó un extenso informe al director de la Unidad 13, conocida como cárcel de Las Rosas, en Maldonado. El texto, de varias páginas, detalla una serie de situaciones que, según el funcionario, comprometen la seguridad del establecimiento, vulneran derechos y evidencian un patrón de abuso de poder.

Vale señalar que la línea de hechos denunciados viene arrastrándose desde el 2020, en el anterior período del Ministerio del Interior. 

"Lo denuncié, lo hablé directamente con las autoridades del centro carcelario, pero nadie movió un dedo por ninguno de los hechos que venimos denunciando" (...) "el ingreso de merca a la cárcel no es novedad para nadie, y eso que ahora hay un escáner corporal" (...) "en esta cárcel, todos saben lo que está mal y funciona mal, pero nadie quiere hacer nada por cortar con la joda", señaló una fuente consultada al respecto de las denuncias. 

En el núcleo de la denuncia está un episodio ocurrido durante un turno nocturno: la subdirección ordenó que el personal permaneciera cumpliendo una requisa semanal, contraviniendo una directiva previa del propio director. La denuncia oficial sostiene que el turno nocturno trabaja con dotaciones mínimas y que estas disposiciones, además de contradecir órdenes jerárquicas, exponen a riesgo tanto a policías como a personas privadas de libertad (PPL).

Este funcionario penitenciario de alto rango cuestiona también la metodología de las requisas, que en Las Rosas se realizan semanalmente y en días previsibles, lo que —a su juicio— permite que los internos oculten elementos prohibidos con antelación.

Decisiones que ponen en riesgo a internos

El informe describe varios casos en los que medidas de protección a presos fueron revertidas sin justificación. Entre ellos, el de un interno que había sido trasladado de sector por sufrir amenazas y robos, y que luego fue devuelto a su lugar original pese a los riesgos advertidos.

También denuncia traslados irregulares a la chacra externa de la unidad, sin cumplir con el proceso habitual de evaluación y requisitos. En otro episodio, un preso condenado permaneció en un sector de preventivos —algo que contraviene la normativa interna—, situación que derivó en un conflicto con saldo fatal, vale decir con la muerte de otro detenido de Las Rosas. 

Cobros para traslados: la voz de los presos

La situación toma un cariz aún más grave con otra línea de investigación: audios aportados a Cadena del Mar y que integran la carpeta con la denuncia presentada ante Fiscalía contienen testimonios directos de privados de libertad que aseguran que les pidieron dinero para ser trasladados a la chacra o a sectores más tranquilos de la prisión.

En uno de esos registros, un interno denuncia y cuenta en un audio junto a otro detenido:

"A este le querían cobrar 70 mil pesos para trasladarlo a la cocina o a la chacra de la cárcel. A mí me cobraron 30 mil para pasarme al 5".

Estos audios, que ya forman parte de un expediente judicial, apuntan a una presunta red de cobros irregulares dentro de la unidad y podrían derivar en acusaciones por corrupción y cohecho.

Otra denuncia: acoso sexual a funcionaria

En paralelo, la Fiscalía, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Trabajo investigan un caso de acoso sexual y laboral contra una funcionaria de la Unidad 13.

Según fuentes del caso, esta denuncia se tramita de forma independiente, pero configura un cuadro de conflictividad laboral y vulneración de derechos dentro del establecimiento.

Un clima laboral tenso y marcado por la desmotivación

La oficial denunciante asegura que el personal policial trabaja bajo un ambiente de “temor, desmotivación y hostigamiento”, donde las órdenes cambian sin explicación, se aplican sanciones desproporcionadas y se utilizan expresiones despectivas para referirse a funcionarios.

Entre las irregularidades señaladas, figuran la asignación de recargos sin respetar licencias programadas, cambios de puesto sin consulta a jefes de servicio y favoritismos en el trato hacia determinados funcionarios.

Problemas edilicios y fallas en el trato a los privados de libertad

El informe también detalla carencias estructurales: sectores con filtraciones de agua, celdas sin iluminación, reducción de raciones de comida y deficiencias en el área femenina.

La denuncia oficial subraya que estas condiciones no solo afectan la dignidad de las personas privadas de libertad, sino que incrementan el riesgo de incidentes y atentan contra el objetivo de rehabilitación.

Lo que viene

Luego de conocerse toda esta situación interna de presunta corrupción, comienza el trabajo de la Fiscalía para desentrañar la red de irregularidades y poner foco en la inoperancia de los mandos superiores de la Unidad 13.

En los próximos días se prevé que se sumen más elementos probatorios, incluidos nuevos testimonios y documentos aportados por funcionarios que, desde dentro de la cárcel de Las Rosas, vienen denunciando hechos con características de corrupción.

De confirmarse las acusaciones, el caso podría derivar en imputaciones por cohecho, abuso de funciones y encubrimiento, además de una eventual reestructura en la conducción del penal.