BRASIL
Presidente Lula: escándalo golpea al gobierno con su hermano mayor involucrado
Tras un millonario desfalco a jubilados y pensionistas en Brasil, renunció un Ministro de Lula da Silva.
El Presidente brasileño aceptó la renuncia del Ministro de Seguridad, Carlos Lupi, bajo sospecha de corrupción.
Se detectaron descuentos no autorizados en los recibos de jubilaciones y pensiones, realizados por sindicatos y otras asociaciones, con la posible connivencia de funcionarios gubernamentales.
El Poder Ejecutivo, comunicó la dimisión del integrante del gabinete a través de un comunicado de prensa, citando al ahora exjerarca: “Tomo esta decisión con la certeza de que mi nombre no fue señalado en ningún momento en las investigaciones en curso”, se defendió Lupi.
Los investigadores, estiman que unos 1.100 millones de dólares fueron descontados entre los años 2019 y 2024 por sindicatos y asociaciones "que debían prestar servicios a jubilados, como asistencia jurídica u obtención de descuentos en planes de salud; y al momento, una porción no determinada de ese monto, se habría debitado de forma ilícita".
Entre los implicados figura un sindicato muy poderoso, donde el hermano del Primer Mandatario es directivo.
Desde el Gobierno, se comprometieron a indemnizar a todos los defraudados, pero sin especificar cómo ni cuándo realizarán el reembolso.
Existen una serie de bienes incautados -producto del avance en la pesquisa policial-, cuantificados en más de 350 millones de dólares.
“A los jubilados a los que se les hicieron retiros ilegales les garantizaremos su dinero, pero por el momento no es posible dar un número ni fijar un plazo. Estamos organizando este plan, y en las próximas semanas lo presentaremos”, expresó un interventor.
Más de un millón de retirados, han registrado quejas formales ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) de Brasil.
Vínculo familiar agrava el impacto:
El Sindicato Nacional de los Jubilados y Mayores (SINDNAPI), cuyo presidente es José Ferreira da Silva, conocido como Frei Chico -hermano de Lula-, está comprometido.
El histórico dirigente sindical, fue quien introdujo a da Silva en el movimiento obrero, en los años 60.
Con 83 años de edad, continúa al frente de una central referente en lo sindical -que ahora está bajo el foco de la investigación-.
Con esto, especulaciones históricas en torno a las relaciones del Partido de los Trabajadores (PT) con ciertas estructuras sindicales, reviven en la opinión pública.