ARGENTINA

Argentina conmemora 48 años del Golpe Militar en medio de controversias sobre la cifra de Detenidos Desaparecidos

En el aniversario del golpe de Estado que marcó uno de los períodos más oscuros de la historia argentina, el debate se reaviva con las recientes declaraciones del presidente Javier Milei cuestionando la cifra oficial de 30.000 desaparecidos.

Cuarenta y ocho años después de terminar la última dictadura militar en Argentina, la cifra exacta de desaparecidos sigue siendo un enigma sin resolver.

Los organismos de derechos humanos estiman que alrededor de 30.000 personas fueron asesinadas por el régimen que gobernó entre 1976 y 1983.

Esta cifra ha sido un emblema en la lucha por "Memoria, Verdad y Justicia", pese a que aún se buscan archivos de esa época que puedan aportar luz sobre el número real de víctimas.

Veronica Smink, para BBC News Mundo, resalta cómo Argentina se ha convertido en un referente mundial de justicia al llevar ante tribunales civiles a más de 1.200 represores militares.

Sin embargo, la incertidumbre sobre el total de desaparecidos persiste, debido en parte a la dificultad de acceder a archivos militares que siguen resguardados.

El debate sobre la cifra de desaparecidos ha resurgido con la llegada al poder de Javier Milei y su vicepresidenta, Victoria Villarruel, quienes cuestionan el número de 30.000 y sostienen que los desaparecidos fueron considerablemente menos.

Esta postura ha generado controversia y reavivado un debate histórico sobre la memoria y la interpretación de los sucesos durante la dictadura.

Un aspecto crucial de la represión militar fue la práctica de los "vuelos de la muerte", una metodología de exterminio que consistía en arrojar a personas vivas al Río de la Plata o al Océano Atlántico.

Estos vuelos son uno de los ejemplos más cruentos del plan sistemático de desaparición y tortura implementado por el régimen.

A pesar de los esfuerzos por documentar y juzgar estos crímenes, aún hay muchas víctimas cuya suerte final es desconocida.

La discrepancia en las cifras no solo se debe a la falta de archivos, sino también al temor y la represión que impidieron que muchas familias denunciaran las desapariciones. Además, la destrucción y el ocultamiento de evidencia por parte de los militares ha complicado la tarea de establecer un número preciso.

Figuras como Taty Almeida, de las Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora, y Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, han señalado que la cifra de 30.000 debe entenderse más como un símbolo que representa el alcance del terrorismo de Estado y la magnitud de la tragedia vivida.

El cuestionamiento de la cifra oficial por parte de Milei y Villarruel ha generado un amplio debate en la sociedad argentina, en un momento en que el país sigue lidiando con las secuelas de su pasado dictatorial.

Este debate se inscribe en un contexto más amplio de cómo se recuerda y se procesa la historia de la violencia política en Argentina.

La lucha por la memoria, la verdad y la justicia continúa siendo una columna fundamental para los organismos de derechos humanos y para una gran parte de la sociedad argentina.


La sociedad argentina reflexiona sobre la memoria, la verdad y la justicia, en un día importante para reafirmar el compromiso con el esclarecimiento de los crímenes de la dictadura.

La determinación de un número exacto de desaparecidos podría nunca alcanzarse, pero el compromiso con el esclarecimiento de los crímenes de la dictadura y la reparación a las víctimas y sus familias permanece íntegro.

La historia de los "vuelos de la muerte" y la incertidumbre sobre el número de desaparecidos reflejan la complejidad de enfrentar un pasado traumático y la importancia de mantener viva la memoria colectiva para asegurar que tales atrocidades no se repitan.