quiet luxury

La moda silenciosa: El estilo discreto y sofisticado que la serie 'Succession' impuso.

La moda silenciosa, o quiet luxury, popularizada por Succession, apuesta por la elegancia discreta con prendas de alta calidad, colores neutros y sin logotipos, reflejando un lujo refinado que prioriza la durabilidad y la sofisticación.

La tendencia de la moda silenciosa (quiet luxury) se consolidó como un fenómeno global, impulsada por la serie Succession.

Este estilo, que retrata el guardarropa de las élites multimillonarias, se caracteriza por prendas de apariencia simple pero confeccionadas con materiales nobles como cashmere, lana, seda o lino, cortes impecables y una ausencia total de logotipos visibles.

En lugar de ostentación, la moda silenciosa comunica poder y elegancia a través de la calidad, evocando la estética del "viejo dinero" (old money).

En Succession, personajes como Shiv Roy (Sarah Snook) lucen pantalones de sastrería, blusas lisas y blazers de firmas exclusivas en tonos neutros como beige, gris o azul marino.

A su vez, Kendall Roy (Jeremy Strong) opta por sweaters de cashmere y remeras de algodón premium, mientras que Logan Roy (Brian Cox) refleja autoridad con trajes clásicos y camisas a medida. Esta estética no solo define su estilo, sino que refuerza el mensaje de discreción y poder asociado a las grandes fortunas.

La tendencia responde a un cambio cultural donde la ostentación se percibe como superficial, dando paso a un lujo sostenible y duradero.

Celebridades como Gwyneth Paltrow y Sofía Richie Grainge han adoptado este estilo, consolidándolo como aspiracional. Para incorporar la moda silenciosa, se recomienda invertir en básicos atemporales (como un blazer neutro o una camisa blanca de calidad), priorizar materiales de alta calidad, mantener un guardarropa de colores combinables y evitar prendas llamativas o con logos grandes.

La moda silenciosa trasciende la estética: es un lenguaje de confianza y refinamiento que Succession llevó del exclusivo mundo de las élites a un público global, promoviendo una elegancia de bajo perfil que valora la calidad sobre la exhibición.