SALUD MENTAL

Justin Bieber: "Sé que estoy roto". Lucha emocional y crítica a la inquietud pública.

El cantante canadiense compartió reflexiones personales en sus redes sociales, donde reconoció problemas de ira y agotamiento emocional. Sus mensajes reavivaron el debate sobre la salud mental y lo que significa el éxito.

El músico Justin Bieber volvió a encender las alarmas de sus seguidores, con una serie de publicaciones en las que habló sin filtros sobre su estado emocional y sus conflictos internos.

A los 31 años, el artista canadiense reconoció: "Sé que estoy roto. Sé que tengo problemas de ira", en un mensaje que no tardó en viralizarse y provocar múltiples reacciones.

En su texto, Bieber expresó su hartazgo ante quienes le piden que "se sane" o que "arregle" su vida.

"¿No creen que si pudiera haberme arreglado, ya lo habría hecho?", cuestionó. Además, reveló que el esfuerzo constante por cumplir con las expectativas ajenas, sólo ha incrementado su cansancio y enojo: "Intenté toda mi vida hacer el trabajo para ser como esas personas que me decían que debía arreglarme como ellos, y eso sólo me agota más".

El artista, famoso por éxitos como "Baby" y "Sorry", también mencionó el papel que juega la fe en su proceso personal: "Jesús es la única persona que me inspira a dedicar mi vida a los demás", confesó.

"Estoy agotado de hablar sobre mí mismo últimamente, ¿ustedes no lo están también?", añadió con ironía.

Horas antes, el cantante ya había publicado una historia en la que pedía a sus fans que dejen de preguntarle cómo se siente.

"No les hago eso a ustedes. Todos sabemos lo difícil que es la vida. No proyecten sus inseguridades sobre los demás", escribió, señalando que la preocupación constante de algunos seguidores le resulta "opresiva" y "extraña".

Las publicaciones incluyeron además capturas de pantalla de una discusión por mensajes de texto con una persona no identificada, en la que Bieber sostuvo: "Nunca suprimiré mis emociones por nadie. Si no te gusta mi ira, entonces no te gusto yo".

En ese intercambio, el artista anunció el final de la amistad con su interlocutor: "Nunca aceptaré que un hombre llame a mi ira un ataque. No estaba bromeando cuando te dije que no te necesitaba como amigo".

Estas declaraciones no pasaron desapercibidas para el público ni para los medios internacionales, que interpretaron el tono de sus mensajes como una nueva señal de alarma respecto a su salud mental.

Los comentarios de algunos seguidores reflejaron esa inquietud: "Que alguien lo ayude antes de que sea demasiado tarde", escribió un usuario en redes sociales.

En paralelo, Bieber también compartió imágenes más personales y cotidianas, como regalos que recibió por el Día del Padre y fotos de su hijo Jack Blues, fruto de su relación con Hailey Bieber. Sin embargo, varias de estas imágenes fueron acompañadas por mensajes ambiguos, como una selfie con el emoji del dedo medio levantado o la frase: "Soy un papá con el que no se debe jugar".

Los episodios recientes se suman a otras señales de vulnerabilidad que el artista ha mostrado públicamente en los últimos años, alimentando el debate sobre el impacto de la fama temprana y la presión mediática en su salud emocional.

Por el momento, los representantes de Justin Bieber no han emitido comentarios oficiales sobre estas publicaciones, ni sobre su estado de ánimo actual.