Conmemoración
Día mundial de la libertad de expresión de pensamiento
La libertad de expresión de pensamiento es un derecho inalienable para los seres humanos. Es importante para el desarrollo personal y la dignidad de cada persona, y es fundamental para el disfrute de otros derechos humanos.
Cada 20 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Libertad de Expresión del Pensamiento.
Con la celebración de esta efeméride se pretende reafirmar y apoyar la diversidad de opiniones y el derecho a la libertad de expresión sin hostigamiento a los pensamientos, opiniones y creencias de las personas, como base de la sociedad moderna.
Este día mundial pretende visibilizar el acosamiento y encarcelamiento de personas por ejercer el derecho a la libertad de expresión, violando sus derechos humanos fundamentales relacionados con la búsqueda y divulgación de información, ideas y opiniones sin represalias.
Al respecto, la Organización de las Naciones Unidas en su Declaración Universal de Derechos Humanos emitida en el año 1948 estableció en el artículo 19º el derecho que posee todo individuo a la libertad de opinión y de expresión, lo que incluye no ser cuestionado por sus opiniones, el derecho a investigar, recibir y difundir información sin limitaciones, por cualquier medio de expresión.
Según Amnistía Internacional en el mundo entero hay personas que son acosadas y encarceladas por ejercer su derecho a la libertad de expresión, pero todo el mundo tiene derecho a buscar, recibir y difundir información e ideas sin temor o injerencias. Este derecho es importante para el desarrollo personal y la dignidad de cada persona, y es fundamental para el disfrute de otros derechos humanos. La libertad de expresión guarda una estrecha relación con el derecho a defender la propia opinión y con el derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión.
En los últimos años se han invocado tanto el temor al terrorismo como la seguridad para justificar un aumento de la represión de las personas y los grupos que ejercen su derecho a la libertad de expresión. Estas medidas son cortas de miras. El debate abierto y el respeto por los derechos humanos son el único marco en el que la seguridad y el desarrollo pueden sostenerse.
Internet ha abierto nuevas vías para que personas y grupos busquen y difundan información e ideas. Sin embargo, también es una nueva frontera en la que la libertad de expresión está encarando nuevos desafíos. Por ejemplo, en China se han introducido nuevos reglamentos para aumentar los controles oficiales sobre Internet. La regulación y la censura se han extendido a autores de blogs y propietarios de sitios web, llegándose a cerrar numerosos sitios web por proporcionar información que las autoridades consideraron “delicada”. Los cibernautas que suben esos datos a la red corren el riesgo de ser detenidos, procesados y encarcelados.