Maldonado
Un total de 6 judicializados por asociación para delinquir y estafas mediante la maniobra “cuento del tío”.
Seis personas fueron imputadas por su participación en una red de estafas telefónicas que afectó a adultos mayores entre 84 y 93 años. Las víctimas fueron engañadas con el clásico “cuento del tío”, perdiendo cerca de un millón de pesos. Cuatro fueron detenidas en Barros Blancos, dos más fueron identificadas posteriormente, y todas enfrentan penas de prisión o medidas cautelares.
La Jefatura de Policía de Maldonado informa que, tras una exhaustiva investigación del Departamento de Estafas, se logró desarticular una red dedicada al llamado “cuento del tío”, que afectó a adultos mayores de entre 84 y 93 años en el departamento de Maldonado.
Los estafadores simulaban ser familiares cercanos, asegurando haber sufrido un accidente o robo, y solicitaban dinero urgente para “resolver la situación”. Las estafas alcanzaron montos cercanos al millón de pesos uruguayos.
Mediante un trabajo minucioso de análisis de datos, rastreo telefónico, cámaras de seguridad y otras fuentes de inteligencia, los investigadores lograron identificar a los responsables. En coordinación con la Fiscalía Especializada en Delitos Económicos (3° Turno), se gestionaron las órdenes judiciales correspondientes.
El 29 de octubre de 2025, se llevó a cabo un operativo en Barros Blancos, Canelones, con apoyo del Grupo de Respuesta Táctica (GRT), resultando en la detención de cuatro hombres mayores de edad, todos con antecedentes penales. Durante el procedimiento, se realizaron inspecciones y se incautaron aparatos electrónicos vinculados a las maniobras delictivas.
Los cuatro detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía de 3° Turno. Al día siguiente, 30 de octubre, comparecieron ante la Justicia en el Juzgado Letrado de 4° Turno de Maldonado, donde se dictaron las siguientes resoluciones:
Nicolás Agustín Guerrero Pérez, de 20 años, fue condenado como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir en reiteración real con un delito de estafa, recibiendo una pena de 12 meses de prisión efectiva.
N.S.M.O., de 37 años, fue condenado por reiterados delitos de estafa en reiteración real, debiendo cumplir 18 meses de prisión: los primeros 4 meses efectivos, y el resto en régimen de libertad a prueba.
J.N.P.B., de 31 años, fue formalizado por un delito de estafa en calidad de coautor y un delito de asociación para delinquir en calidad de autor, ambos en régimen de reiteración real. Se dispuso arresto domiciliario total por 120 días como medida cautelar.
El cuarto detenido quedó en libertad tras la audiencia judicial.
Las investigaciones continuaron, permitiendo identificar a un quinto involucrado: M.D.H.R., de 21 años, con antecedentes penales. El 11 de noviembre, personal del Departamento de Hechos Complejos, con apoyo del GRT, allanó una vivienda en calle Intendente Rivera, Barros Blancos, deteniéndolo. El 12 de noviembre, fue imputado en el Juzgado de 11° Turno por tres delitos de estafa (coautor) y uno de asociación para delinquir (autor), quedando en prisión preventiva por 120 días.
Finalmente, se determinó la participación de un sexto individuo: A.E.P.M.O., de 19 años, sin antecedentes, también residente en Barros Blancos. Su orden de detención fue ejecutada el 28 de diciembre por efectivos del PADO de Canelones durante un patrullaje en Ruta 74 y calle José Pedro Varela.
El 29 de diciembre, en audiencia en el Juzgado de 4° Turno, A.E.P.M.O. fue condenado como coautor de cinco delitos de estafa agravada y autor de un delito de asociación para delinquir, todo en reiteración real. La pena impuesta es de 24 meses de prisión:
6 meses efectivos,y 18 meses en libertad a prueba, bajo las obligaciones de residir en lugar controlable por la DINAMA, presentarse semanalmente en comisaría, someterse a vigilancia institucional y prestar servicio comunitario.
Este caso evidencia el compromiso sostenido de la Policía de Maldonado en la lucha contra los delitos económicos que afectan a sectores vulnerables. El trabajo articulado entre unidades especializadas y fiscalías permite desmantelar redes delictivas complejas y garantizar justicia para las víctimas.