SALUD

Más pequeño que un grano de arroz: Diseñan innovador marcapasos.

Ingenieros de la Universidad Northwestern han creado el marcapasos más pequeño del mundo, diseñado para recién nacidos con cardiopatías congénitas. Activado por luz y del tamaño de una punta de jeringa, este dispositivo biodegradable no requiere cirugía para su implantación ni extracción.

Este innovador marcapasos, más pequeño que un grano de arroz, se inyecta directamente en el corazón mediante una jeringa.

Ideal para bebés que necesitan estimulación cardíaca temporal tras cirugías, el dispositivo se combina con un parche portátil que detecta latidos irregulares y emite pulsos de luz para activarlo.

Fabricado con materiales que se disuelven naturalmente en el cuerpo, el marcapasos elimina la necesidad de intervenciones quirúrgicas para retirarlo.

Los pulsos de luz, que atraviesan la piel y los tejidos, controlan el ritmo cardíaco de forma precisa, ofreciendo una solución segura y no invasiva.

Probado en modelos animales y corazones humanos donados, este dispositivo responde a la necesidad crítica de marcapasos temporales en pediatría: “Queríamos ayudar a los niños con cardiopatías congénitas, que a menudo solo necesitan estimulación por pocos días”, explicó Igor Efimov, Codirector del proyecto.