ZONA OESTE
Inseguridad en Pan de Azúcar: “Es tierra de nadie”, denuncian los vecinos.
Según informes de nuestra corresponsal en la zona oeste, Mara Princesa Arévalo, residentes de la ciudad pandeazuquense han venido viviendo distintas situaciones desfavorables entre las que destacan un reciente tiroteo con un herido de bala, robos y rapiñas, ataques de perros a ganado en zonas rurales, y preocupación por un refugio del Mides en el barrio Itusaingó.
Según vecinos de Pan de Azúcar, desde hace tiempo que se vienen dando insucesos que han afectado a la seguridad de sus habitantes, tanto en el cono urbano, como en las áreas rurales del municipio.
Nuestra compañera Mara Princesa Arévalo, realizó un recuento de los principales hechos que han generado alarma entre los ciudadanos.
El evento que más trascendió, consistió en un violento incidente que sacudió el barrio Las Brisas el pasado domingo a las 17.00 horas, cuando un enfrentamiento dejó a una persona herida de bala. El herido fue trasladado al hospital de Pan de Azúcar por un vecino, en un populoso sector cercano a la pista de skate donde niños y familias suelen reunirse.
Además, los vecinos denuncian una ola de robos y rapiñas que azota Pan de Azúcar, con delincuentes armados actuando con impunidad, incluso a plena luz del día. La situación, descrita como “tierra de nadie”, se agrava por la presencia de motos utilizadas para cometer desmanes, según reportes en redes sociales.
A su vez, en las áreas rurales, los habitantes enfrentan pérdidas por ataques de perros que matan ovejas y afectan el abigeato. Este problema, recurrente en la zona, suma preocupación a los productores locales, quienes reclaman medidas urgentes para controlar a los animales.
Otra problemática que aqueja a algunos habitantes de la ciudad, es la instalación de un refugio del MIDES en el museo Monseñor Jacinto Vera, en el barrio Itusaingó, genera inquietud entre los vecinos.
La infraestructura precaria, con problemas como filtraciones y un calefón que dañó el baño, y la llegada de personas en situación de calle desde Piriápolis, alimentan el temor a un aumento de la inseguridad en este tranquilo barrio de trabajadores