Reforma de policlínicas

Eduardo Antonini: "Ninguno de estos planteamientos fue incluido en el presupuesto quinquenal y luego se agravó la situación"

Eduardo Antonini habló en "La Mañana en Cadena" respecto a la policlínica de Gregorio Aznárez, el proyecto Arazatí, la posición del Frente Amplio en cuanto a la política del departamento y las condiciones del Hospital de Maldonado

Antonini recordó el momento en que él y otros denunciaron el estado deteriorado de la Policlínica hace meses, resaltando la falta de refacciones y mejoras necesarias. Lamentó que esta situación tenga sus raíces en decisiones presupuestarias pasadas que no incluyeron la inversión necesaria en infraestructura de salud en la región.

Durante la entrevista, Antonini destacó que entre los planteos que realizaron en el pasado, se encontraban tres puntos esenciales relacionados con la salud en la zona: la necesidad de un acelerador lineal en San Carlos, la reforma de la Policlínica de Rodríguez Barrios y de Gregorio Aznárez, así como la remodelación del hospital local. Ninguno de estos planteamientos fue incluido en el presupuesto quinquenal, lo que agravó la situación.

El jueves pasado, la situación llegó a un punto crítico cuando se supo que una rajadura había expuesto la estructura del edificio y que el aire acondicionado se había caído debido al agrandamiento de la grieta. Esto llevó a la clausura de la policlínica, lo que afecta gravemente a la población que depende de sus servicios médicos.

Antonini señaló la importancia de abordar este problema de manera inmediata, ya que la atención médica es un derecho fundamental y no debería verse comprometida por problemas estructurales que podrían haberse evitado. Además, hizo un llamado a las autoridades para que tomen medidas urgentes y restablezcan los servicios de atención médica en la zona. "Han apareció Cipriani después Antía, dijeron que buscaban una solución y que iban a hacer la policlínica en otra vivienda".

El diputado también abordó la problemática de la sequía que afectó a Montevideo, Canelones y otras áreas del área metropolitana. Señaló que "la población se ha visto gravemente afectada por la falta de agua" y explicó que "esta situación no solo se limita a la falta de lluvias, sino también a la calidad del agua disponible". Comparó el agua disponible en la región con agua salada, lo que refleja la gravedad del problema.

Antonini hizo referencia a un proyecto previo, la represa de Casupá, que se dejó sin efecto. Este proyecto tenía como objetivo garantizar el abastecimiento de agua en la región durante décadas. Sin embargo, el Ministerio de Economía y Finanzas rechazó las líneas de crédito relacionadas con este proyecto, lo que llevó a la búsqueda de alternativas.

Antonini mencionó que un grupo de empresarios presentó una propuesta al gobierno para la construcción de la represa de Arazatí. El proyecto, inicialmente presupuestado en 290 millones de dólares, ahora se estima en casi 900 millones de dólares debido a cambios en el proceso de licitación. Esta cifra representa una carga significativa para el presupuesto nacional.

Una de las preocupaciones centrales de Antonini es cómo se financiará esta inversión masiva y cuál será el impacto en la economía nacional. Destacó que "esta suma es comparable a una parte importante de la recaudación del gobierno, y es necesario considerar cómo se gestionarán estos costos durante las próximas décadas".

Antonini compartió sus inquietudes y perspectivas sobre la situación política en Maldonado y el futuro del Frente Amplio en el departamento. 

En relación con la crisis del suministro de agua potable que afectó a Maldonado, Antonini recordó que el Frente Amplio asumió un fideicomiso de 55 millones de dólares destinado a obras en el departamento. Aunque reconoció la necesidad de estas obras, expresó su preocupación por el impacto en las finanzas departamentales, ya que los fondos provendrán de la recaudación de la tarifa 9 de Maldonado. Esto, según Antonini, podría llevar al departamento a un estado deficitario.

Antonini también cuestionó la decisión de entregar la administración de los servicios de agua potable a empresas privadas, considerando que esto va en contra de la Constitución de la República, que prohíbe que el agua esté en manos de privados o tenga fines de lucro. Además, señaló que la ubicación de la fuente de agua en Arazatí plantea serios problemas ambientales y de calidad del agua debido a la concentración de cianobacterias en la zona.

En cuanto a la situación política departamental, Antonini destacó que el Frente Amplio está experimentando un proceso de transformación y renovación. Afirmó que se han incorporado nuevas figuras y se ha promovido una autocrítica constructiva. Además, señaló que el partido está preparando elecciones internas en las que se definirá al candidato para las próximas elecciones departamentales.

Sobre la situación del Partido Nacional en Maldonado, Antonini reconoció que también enfrenta desafíos en la sucesión de cargos. Sin embargo, enfatizó que el Frente Amplio se enfoca en trabajar con calma y en desarrollar propuestas para abordar las preocupaciones de los ciudadanos, como la salud mental, la seguridad, la prevención de adicciones y la calidad de los servicios públicos. "Tenemos una ley de salud mental que se votó y se empezó a implementar y después fue dejada de lado."

En cuanto al INE, Antonini explicó que la metodología del INE se basa en preguntar a las personas si han trabajado en el último mes. "Si una persona ha realizado cualquier tipo de trabajo, incluso informal, se la considera "ocupada" en las estadísticas del INE". Esto puede llevar a una percepción incorrecta de la situación laboral en el país, ya que muchas personas pueden estar trabajando de manera informal y precaria, sin acceso a beneficios laborales ni seguridad en el empleo.

En cuanto a la situación reciente del Hospital de Maldonado, Antonini señaló que la situación "es lamentable y que los funcionarios del sistema de salud hacen todo lo posible para brindar atención a los pacientes". Destacó el esfuerzo de médicos y enfermeros que trabajan en condiciones difíciles para garantizar la atención médica necesaria.

El político también criticó la falta de acción por parte de la dirección del hospital, argumentando que "la responsabilidad recae en ellos por no activar los protocolos necesarios cuando la espera en la emergencia supera ciertos límites". Antonini subrayó que los trabajadores de la salud no son culpables de esta situación y que es responsabilidad de la dirección del hospital tomar medidas para mejorar la atención y reducir los tiempos de espera.

En cuanto a la falta de medicamentos, Antonini reveló que se produjo un recorte del 30% en la compra de medicamentos en el presupuesto pasado. Esta reducción en el suministro de medicamentos ha llevado a una escasez en los hospitales de todo el país, incluido Maldonado. Antonini argumentó que este recorte tiene un impacto directo en la calidad de la atención médica y afecta a los pacientes que no pueden acceder a los medicamentos que necesitan.