ESPECTÁCULO NATURAL

Lluvia de meteoros (Gemínidas 2025): cuándo y cómo ver desde Uruguay la más intensa del año.

El fenómeno astronómico tendrá su punto máximo en la madrugada del domingo 14 de diciembre y, en condiciones ideales, permitirá observar más de un centenar de meteoros por hora. Aunque el clima podría complicar la visibilidad, las Gemínidas siguen siendo uno de los espectáculos celestes más esperados por astrónomos y aficionados.

La tradicional lluvia de estrellas Gemínidas tendrá su máximo esplendor en la madrugada del 14 de diciembre de 2025, y Uruguay será uno de los países con mejores oportunidades para disfrutar el fenómeno, siempre que el tiempo acompañe.

El Observatorio Astronómico Los Molinos informó en sus paltaformas que, bajo un cielo despejado, podrían apreciarse entre 120 y 150 meteoros por hora, convirtiéndola en una de las lluvias más activas del calendario astronómico.

Las Gemínidas tienen como cuerpo progenitor al asteroide 3200 Phaethon, un objeto rocoso con un período orbital de 1,4 años.

Su particularidad es que se trata de una lluvia generada por un asteroide y no por un cometa, algo inusual dentro de los eventos meteorísticos anuales.

Recién en 1983, gracias al telescopio infrarrojo IRAS de la NASA, se logró identificar la relación directa entre Phaethon y esta lluvia de meteoros.

¿Cómo observar la lluvia desde Uruguay?

Para ubicar el radiante -el punto del cielo desde donde parecen surgir los meteoros-, basta con orientarse utilizando a Júpiter como referencia y dirigir la mirada hacia la constelación de Géminis.

En la zona este costera, el mejor horario para la observación sería alrededor de la 01:30 horas de la madrugada (de la medianoche de sábado 13 al domingo 14 de diciembre).

No se requieren instrumentos ópticos: ni telescopios ni binoculares.

Lo ideal es encontrar un sitio con baja contaminación lumínica, mirar hacia el radiante y tener paciencia, ya que el ojo humano necesita algunos minutos para adaptarse a la oscuridad.

¿Por qué ocurren las Gemínidas?

La lluvia se repite cada diciembre debido al paso de la Tierra por una nube de partículas desprendidas de Phaethon.

Durante siglos, su origen fue un enigma porque no se asociaba a ningún cometa periódico, hasta que el análisis orbital del asteroide permitió resolver el misterio.

Al ingresar a la atmósfera terrestre, esos fragmentos se incineran y producen las populares estrellas fugaces.

Imagen: ilustrativa.